Una interacción dinámica
paisaje cultural cafetero
Durante varias décadas la relación existente entre el patrimonio cultural y el turismo ha sido motivo de preocupación para los especialistas,
quienes han tratado de conciliar los intereses de la creciente industria del turismo y la conservación de los bienes culturales.
Sin embargo hoy
La sostenibilidad del patrimonio cultural,
en el marco del desarrollo económico y social,
se relaciona con el turismo en una interacción dinámica y que genera para ambos oportunidades, desafíos,
y a la vez, potenciales situaciones conflictivas.
Hoy, son los recursos culturales del Paisaje Cultural Cafetero,
los que pueden dar un enfoque innovador y diferenciador al turismo del
Eje Cafetero y el Norte del Valle
área geográfica que actualmente se encuentra sujeta a la evaluación de la Unesco para ser declarada patrimonio mundial.
Un Paisaje Cultural es una parte del territorio,
que resulta de un proceso histórico cultural de relaciones sociales y productivas con un entorno determinado, y que amplía la noción de patrimonio al ámbito territorial.
La valoración del paisaje cafetero como patrimonio
es un punto de referencia para elaborar productos de turismo cultural que ponen en evidencia los elementos constituyentes del Paisaje Cultural Cafetero,
atributos como café de montaña, cultivo en ladera,
tradición histórica en la producción, estructura de pequeña propiedad,
- patrimonio arquitectónico, urbanístico,
- arqueológico,
- natural y disponibilidad hídrica, entre otros
Con atractivos para el turismo cultural, que enfatizan en la autenticidad y excepcionalidad de este paisaje,
sus costumbres, tradiciones, su historia y especialmente la vida en las fincas cafeteras,
el patrimonio cultural y natural manifiesto
La declaratoria del Paisaje Cultural Cafetero como Patrimonio Mundial se presenta como una oportunidad para el desarrollo social y económico de las zonas cafeteras y sus habitantes
en un territorio se puede convertir en factor diferenciador afianzado el compromiso con la conservación del Paisaje Cultural Cafetero.
El PCC argumenta su valor universal excepcional a partir del esfuerzo humano,
familiar, generacional e histórico natural y/o cultural de acción colectiva;
La relación entre tradición y modernización tecnológica consistente con sistemas de calidad y sostenibilidad del producto;
y el capital social estratégico que se ha construido alrededor de una institucionalidad.
La declaratoria del Paisaje Cultutal Cafetero como Patrimonio Mundial por parte de la Unesco se presenta como una oportuniad para el desarrollo social y económico de las zonas cafeteras y sis habitantes,
y se convierte en un mecanismo que contribuye a la protección a la protección.
La pregunta es cómo puede lograrse una interacción adecuada entre los valores del patrimonio cultural y el turismo,
que permita integrar a un mayor número de personas de las zonas rurales y avanzar en la conservación de los bienes culturales y en el desarrollo económico y social de la región.
Una de las iniciativas que busca respuesta a esta pregunta es
«Caminos y memorias de la tierra cafetera»
como principio de una ruta de turismo cultural que puede integrarse a la Ruta del Café,
propuesta de generar un turismo relacionado con valores, servicios y productos auténticos de este paisaje cultural,
uniendo a los departamentos de esta región en una oferta cultual y turística alrededor del Café.